Hace ya un año que el Papa Francisco nos convocó a todos los fieles cristianos a una nueva etapa evangelizadora marcada por la Alegría.

Con palabras llenas de cariño, cercanas y sencillas, nos invita, desde donde nos encontramos y somos, a desgastarnos en nuestro entorno, en nuestra actividad, en nuestro compromiso, con la fuerza gozosa que brota en quien acoge y se entrega a Jesús y a su Buena Noticia.

Invito a cada cristiano, en cualquier lugar y situación en que se encuentre, a renovar ahora mismo su encuentro personal con Jesucristo o, al menos, a tomar la decisión de dejarse encontrar por Él, de intentarlo cada día sin descanso. Él nos permite levantar la cabeza y volver a empezar, con una ternura que nunca nos desilusiona y que siempre puede devolvernos la alegría. No huyamos de la resurrección de Jesús, nunca nos declaremos muertos, pase lo que pase. ¡Que nada pueda más que su vida que nos lanza hacia adelante!...
(Papa Francisco. Evangelii Gaudium).